¿Qué podemos esperar del final de un tratamiento?
Cuando acudimos a terapia lo primero que esperamos es que se extingan los síntomas y el malestar por el cual consultamos, pero más allá de esto, cuando este objetivo está conseguido es normal, si no eres un experto, no saber qué podemos esperar de una terapia ni si nos daremos cuenta de haber finalizadobel proceso de tratamiento.
Horacio Etchegoyen en su obra «Los fundamentos de la técnica psicoanalítica» propone los siguientes indicadores de la terminación del análisis:
1: Modificación de los síntomas por los cuales el paciente se trató.
Aunque no siempre se puede esperar la supresión por completo de los mismos es importante tener en cuenta la intensidad y frecuencia de los síntomas, así como la actitud que uno tome frente a ellos.
2: Normalización de la vida sexual.
Este criterio es importante que no se consiga mediante la ejecución rutinaria de prácticas sexuales si no que se pueda ejercer la actividad sexual espontánea y libremente, la expresión de la libido en fantasías y sueños, teniendo en cuenta el placer del otro.
3: Relaciones familiares modificadas.
4: Relaciones con el entorno social.
Si una persona tiene un nivel de conflicto alto con el entorno esto indica que no se encuentra bien, aunque habría que aclarar aquí que la falta de conflicto no es un indicador de salud mental si no que puede ser una muestra de sometimiento o masoquismo. Como ejemplo de esto mismo uno puede conseguirlo al divorciarse gracias a una terapia o mantener a su mujer que siempre tuvo porque la ve desde una óptica distinta.
5: Disminución de la angustia y la culpa.
Como se añadió en el ejemplo anterior, este ítem no tiene que significar la supresión entera la angustia y la culpa, ya que por un lado la angustia es un indicar que nos puede advertir de un peligro real así como la culpa advertirnos de nuestros errores y permitirnos remediarlos.
6: Renuncia al placer de la fantasía
La renuncia al placer de la fantasía implica renunciar al uso de la mentira y animarse a ser sincero con uno mismo y enfrentarse a la verdad también en la relaciones con los otros.
7: Enfrentar con éxito la angustia de separación.
Y con ello el aprender a despedirnos de lugares, situaciones y de personas.
8: El contenido de los sueños.
Es Meltzer quién señala que los sueños nos muestran la geografía de la fantasía inconsciente y con ella el psicólogo puede conocer el avance de la terapia. Dice de esto Etchegoyen que si uno sueña que camina con un niño de la mano y este es el hijo, tiene alguna característica infantil propia o algo que el paciente tuvo de niño puede decirse que la parte infantil está incorporada a la personalidad. No siendo así si en el sueño el niño es alguien desconocido o que se escapa de la mano.
9: Indicadores lingüísticos.
Se debe a Liberman la teoría de los indicadores lingüísticos en relación a ciertas patologías. Como ejemplo se puede señalar la tendencia a la descripciones con exceso de detalles y de explicaciones por parte de los neuróticos obsesivos (estilo narrativo), por lo que un cambio en la forma de expresarse como podría ser el uso de narraciones de estilo histérico (estilo dramático que genera impacto estético), constituiría es un buen indicador de avance terapéutico.
10: Componente musical del lenguaje.
La entonación y el ritmo del habla pueden indicarnos la mejoría de una persona en terapia. Por ejemplo, es característico de la depresión que la persona se exprese en un tono bajo, con expresiones pausadas y un ritmo lento.
¿Qué opinas de estos indicadores del fin de la terapia? ¿Son relevantes para ti? ¿Cómo vas avanzando tu en tu propio proceso terapéutico? Coméntalo abajo en la cajita de comentarios
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